viernes, 13 de septiembre de 2013

Doctor Who and «frankly»


No quiero desperdiciar el tirón que supone referirse aunque sea con calzador, al discurso de la alcaldesa de Madrid, doña Ana Botella, ante esa cosa fea llamada COI que se parece tanto a nuestra apreciada FIA, porque he aprendido que estas cosas hay que aprovecharlas o al final te expones a que nadie entienda nada cuando vas y sueltas la broma. En fin, el ridículo lo hace todo el mundo al menos una vez en la vida, y los políticos, más. Angela Merkel, por ejemplo, no supo situar Berlin en el mapa de Alemania y el señor Sarkozy... bueno, don Nicolas llevaba alzas para ocultar su estatura, consintió en que le redujeran los michelines con Photoshop para pasar a la posteridad haciendo que sabía sostenerse en una piragua, y hubo un momento realmente chusco en su historia como mandatario de Francia, en el que se creyó capaz de llevarse al huerto (políticamente, se entiende) a la que no sabía dónde estaba Berlin...

Podría seguir pero siento que ha llegado la hora de parar, aunque no quiero desperdiciar la oportunidad que me brinda esta soleada tarde, de recordar aquella botadura de una nao en Sevilla 92, que por falta de calado en el charco y por cerrazón de la clase política ante la posibilidad de dañar el apretado horario oficial, derivó en que la nave se varara de lado ante la prensa y espectadores de medio mundo, claro está, a pocos metros de salir de su astillero. ¿A que ya no hace gracia?

No me cae bien Ana Botella ni los que como ella se creen su papel de señalados por el destino, de manera que espero que comprendáis que me pregunte qué coño hace Pirelli en el Mundial de Fórmula 1 a partir del año que viene, tras las abundantes muestras ofrecidas durante 2103 de su incapacidad manifiesta para hacer neumáticos que respondan a las exigencias de una modalidad deportiva que se dice la más exclusiva de todas.

Pero ahí va a estar la milanesa en un año crucial como pocos, 2014, el momento en que vuelven los motores turbo y cambiará radicalmente el horizonte de la F1, ayudando a sentar el criterio de la próxima década. Pirelli, la misma que en los tres años que lleva en ésto ha cambiado de opinión con la temporada lanzada por el bien del espectáculo y tratando de mantener siempre intacta la integridad de la competición, vuelve por su fueros a intentarlo de nuevo, ya que se vé que las anteriores veces no ha acertado aunque bien que ha querido.

De Silverstone y sus cinco reventones nos hemos quedado con la necesidad de tangar esta temporada a partir de Nürburgring para que Mercedes AMG hiciera su pinitos y sacara pecho ante la cúpula de Daimler, y con aquello de que Red Bull nos haya hecho soñar en verano con el retorno de la magia a la Fórmula 1, aunque todavía no se sabe qué ocurrió con los restos de las carcasas de los neumáticos que rompieron, lo que me lleva a mencionar una alternativa expuesta por más de un aficionado, en la que se abre la posibilidad de que los compuestos de marras pudieran estar sutilmente amañados para cambiar el rumbo de las cosas en un ambiente que resultaba pelín asfixiante.

Esfuerzo, mucho esfuerzo. También mucho amor a todo ésto... El consenso es posible cuando el mal de todos resulta una amenaza creíble. Basta apretar un poco las tuercas para que el milagro quede al alcance de los dedos, y luego a venderlo, a gestionarlo como Dios manda, porque la culpa siempre es de los políticos, de los que deciden y a los que hay que convencer. En definitiva, de aquellos a los que tenemos agarrados por los huevos.

«Ai massei ai laik tu continiu ar frenship, [pause] an frankly» A ver si frankly iba a ser Pirelli y nosotros tomándonos el asunto a risa cuando iba totalmente en serio...

Os leo.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Buenas noches.
No se si he entendido bien el último párrafo pero no creo que tengamos agarrado a nadie por ningún lado. Más que nada por que siempre acabamos siguiéndoles el juego. Tanto a los políticos como a la FIA.

A la Fia le interesa que Pirelli siga el año que viene. Michelín venía resabiada y necesitan que quien lleve algo tan trascendental (en estos tiempos) como las ruedas hable su mismo idioma y estén dispuestos a cambiar lo que haga falta y soportar insultos y demás con tal de seguir en el circo.
La maFia tiene un as en la manga. Otra vez

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenas tardes ;)

Labrador Mordedor ;) Ahí le damos y estoy al 100% de acuerdo contigo. La FIA necesita de Pirelli para seguir manejando el cotarro y por eso la ha renovado, veo que a ti tampoco te caben dudas ;)

Un abrazote

Jose