domingo, 13 de agosto de 2017

Miedo al rival


Lo de la estandarización de algunos componentes que propone Chase Carey para la Fórmula 1 me suena a lo mismo que eso de que los españolitos de a pie hemos salido de la crisis.

El bueno de Chase es el jefazo de lo nuestro con permiso de John Malone, y por aquello de que donde manda capitán no manda marinero, da lo mismo que le creamos o no porque total pa'qué nos vamos a molestar en poner puertas al campo si al final acabaremos pagando el pato.

Esto me recuerda a un profesor de economía que se mataba el pobre porque nos entrara en la cabeza que la macroeconomía no sirve de nada si no se nota en la cocina, y el caso es que la estandarización de los cogieron seguro que tiene sentido para Liberty, la FIA y los equipos, pero nuestra cocina está repleta de cosas estandarizadas que, juraría, son las que nos han llevado al hoyo.

La centralita única (ECU) es un elemento estandarizado, los neumáticos también, las propias unidades de potencia están estandarizadas porque no puedes poner dos MGU-K en vez del MGU-H, ni bajar la cilindrada del ICE para aumentar el turbo, o al revés, hacer más chiquito el turbo para darle más caña al motor térmico. También está estandarizado el consumo, y el caudal máximo por hora. Cuando entre en vigor el periodo de convergencia la estandarización va a ser la caña...

Los últimos reglamentos que ha disfrutado la Fórmula 1 son tan extremadamente puntillosos que apenas hay margen mover una coma en su interior, y eso se ha llamado estándar de toda la vida —RAE: 1. adj. Que sirve como tipo, modelo, norma, patrón o referencia / 2. m. Tipo, modelo, patrón, nivel—, lo que nos pone en que si seguimos estandarizando a lo peor nos pasamos de frenada.

Yo también tengo mis ideas al respecto: dejamos que los equipos hagan de su capa un sayo con unos márgenes nítidamente establecidos en la normativa y estandarizamos lo superfluo para que por ahí puedan apañarse los costos.

No, no estoy de broma. Si Honda paga lo que no está escrito por hacer el indio con McLaren y se está regalando para contar con un segundo equipo, qué no harían Dunlop o Michelin porque alguien les dejase un huequito en el apartado de gomas, o BMW o Porsche o Toyota o la misma Yamaha en el de propulsores (¡ojo que he dicho propulsores, no unidades de potencia híbridas!), con tal de demostrar que su tecnología es mejor que la de los rivales...

La estandarización es un valor comunista: todos con las mismas zapatillas, todos con los mismos pantalones, un único martillo, una única cuchara... todas las escuderías son iguales, pero algunas escuderías son más iguales que otras (¿George Orwell?). No sé, me esperaba otra cosa de Liberty, algo kapitalistik y muy americano: menos miedo a la sana rivalidad, auténtico incentivo y motor de las grandezas del ser humano en la Fórmula 1.

Os leo.

1 comentario:

enrique dijo...

Es que no se mw ocurre que más pueden estandarizar. Llevamos demasiado tiempo con una reglamentación tan rígida que todos los coches son iguales. No se por que razón un equipo pequeño no puede tener un señor motor y una aerodinamica de mierda, por ejemplo. Y a todo esto, sin entrenamientos en los que poder reducir distancias...