jueves, 15 de marzo de 2018

A la sombra de un león


Así empieza la historia: «Creo que es bastante normal que tras los primeros días de test, cada equipo intente llevar al proveedor de neumáticos en la dirección que se adapta mejor a su coche. Creemos que Pirelli ha hecho un buen trabajo con su selección de neumáticos» [Ferrari en el GP de Australia F1 2018: Previo].

Hombre, no voy a discutir que sea normal o no, otra cosa es que me parezca feo que se admita en público que éstas cosas pasan.

Las escuderías y los pilotos han comenzado a elegir gomas para los primeros grandes premios y supondría un auténtico pastelón que algo tan normal se volviese a dar en 2018. Se ha dicho tantas veces que las ruedas son iguales para todos los equipos, que se sortean los juegos para que no haya mamoneos, etcétera, etcétera, que difícilmente encaja que «cada equipo intente llevar al proveedor de neumáticos en la dirección que se adapta mejor a su coche sea bastante normal.» ¿Cómo coño se consigue eso?, sin meter mano, se entiende.

Comprendo que Pirelli también ha estado de pruebas en Montmeló y que queda pulir el producto, pero sin desviaciones, claro, ya que si una escuadra tiene más peso que otra (o las demás) en las decisiones de la milanesa, nos podemos encontrar con escenarios muy similares a los habidos desde 2011 a 2013, donde por cierto, si mencionabas estas cosas te llamaban loco o conspiranoico aunque Paul Hembery te acabase dando la razón: «Es un poco extraño, a menos que todos queráis que demos neumáticos a Red Bull para ayudarla a ganar el campeonato, lo que parece ser el caso» [¿Queréis que demos neumáticos a Red Bull para ganar el campeonato?].

Dicen que dos noticias se entienden mejor si van juntas, así que tomaros el tiempo necesario para leer esta otra [Pirelli cede ante la furia de Red Bull], que vais a ver por dónde van los tiros todavía más claro. Es posterior a la de más arriba, y anterior a los sucesos que provocaron el reajuste definitivo de ruedas después del Gran Premio de Gran Bretaña.

En fin. Si no teníamos bastante con las dudas que afloran en las palabras de Vettel, ha venido Christian Horner a arreglarlo del todo: «Lo que vimos en la carrera de Abu Dhabi no fue la mejor imagen para la F1. De acuerdo, la pista puede influir, pero carreras a una parada no ayudan. Creo que añadir neumáticos más blandos solo puede provocar mejores carreras y pocas pruebas a una sola parada, que es el peor escenario» [La nueva gama de Pirelli dejará mejores carreras].

No es que no lo hayamos venido avisando [La estrategia a una parada son los padres], ni siquiera que rasque mucho que a Red Bull le viniera de perlas un escenario con pocas paradas y compuestos duros en 2013 —y se lo dieran, como espero que hayáis comprobado en el enlace de El País—, y haya cambiado radicalmente de posición para 2018, seguramente con la intención de que también se lo den ahora.

Lo que me preocupa de todo este asunto es que parece que lleva razón Sebastian y es bastante normal que una vez que cada equipo ha echado sus cuentas y ha hecho sus estimaciones para la temporada, se pueden cambiar las cartas cuando se ha apalabrado con qué baraja se va a jugar.

Y ya que estamos, y por terminar, si no es mucho abusar le preguntaría a Mario Isola que me recomendase a qué león apostar una vez haya terminado la fase de influencia normal de los equipos en la definición de los neumáticos de una temporada cualquiera. Ésta, por ejemplo. En serio, me ahorraría muchos disgustillos saberlo.

Buenas noches, os leo.

5 comentarios:

enrique dijo...

Y digo yo... No sería más sencillo que de entre toda la gama arco iris de Pirelli, cada equipo elija los juegos que le de la gana (porque para eso han hecho test) y luego que ponga los que quiera (con la salvedad de poner dos juegos distintos en carrera)?

Anónimo dijo...

Cuando Alonso en Ferrari criticaba lo pésimo que habían resultado los compuestos, Hembery lo mandaba a un cursillo de verano con Vettel, que si sabía cómo rodarlos...

Cuando años más tarde el alemán (ya de rojo) era quien se quejaba, tibias excusas se escuchaban del proveedor.

Pirelli no deja de observar hacia dónde apunta el dedo del patrón a la hora de formular su producto. El poder ha cambiado de manos, en el marco de un contexto político muy complicado.

Será por contentar a Rampante y evitar su salida? Será por favorecer al pelotón que va a por Mercedes, por el bien del espectáculo?

Las vergüenzas observadas en 2013, o los cambios de ángulo y presiones para derribar a Mercedes no hace mucho. Obras de un pequeño tirano británico, que esperemos no repita Liberty.

fleichié dijo...

En la sección de comentarios del primer link , un aficionado se queja de que Vettel había sido el único piloto que había "visitado" la fábrica de Pirelli , para influir en la confección de los neumáticos.....en 2011!!! .
El eterno retorno, cómo se repiten los mismos sucesos con el paso del tiempo ;)
Demencial .
Te leo maestro .

winarthez dijo...

La culpa de este asunto la tiene el proveedor único de neumáticos.

pocascanas dijo...

El proveedor único de neumáticos sería el chancho, pero quién le dió de comer?